Por Antonella Liborio
Fotografía: Ailen Montañez, Cecilia García

 

Luego de casi 24 horas de tratamiento en el recinto, la Cámara de Diputados del Congreso de la Nación otorgó media sanción a la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Con 129 votos a favor, 125 en contra y 1 abstención se ganó la primera batalla. A partir de ahora el 13 de junio será recordado como el día en que miles de mujeres argentinas transformaron la patria y su destino.

Hasta minutos antes de la votación el eje de la preocupación se centró en los números. Luego de dos meses y medio de debate en el plenario de comisiones, la jornada del miércoles no escatimó en impaciencia y ansiedades.

Alrededor de las 19, las paredes del recinto transpiraban nerviosismo y, sobre todo, incertidumbre. Luego de 8 horas de sesión tanto los partidarios de la legalización como aquellos que se manifestaron en contra, se adjudicaban la victoria.

En el transcurso del día los diputados Luis Beder Herrera (bloque Justicialista), Hugo Marcucci (Cambiemos), José Ignacio de Mendiguren (Frente Renovador) y Roxana Reyes (Cambiemos), anunciaron que su voto sería positivo.

De este modo, a las 23 la definición estaba en manos de 5 o 6 legisladores indecisos y a la medianoche ya se hablaba de «empate técnico». Frente a la posibilidad de tener que acudir al desempate resonaron con fuerza los rumores de que Emilio Monzó, presidente de la Cámara de Diputados, se pronunciaría a favor del proyecto de ley impulsado por la Campaña.

Como el perfecto correlato del paisaje exterior al Congreso, dentro del recinto también se desplegaron con convicción los pañuelos verdes y celestes. Fundamentalmente en el sector de la derecha, donde se ubican los legisladores del bloque Justicialista y del Frente para la Victoria, muchas diputadas lucieron prendas color esperanza y ataron a sus micrófonos el pañuelo de la Campaña.

Nerviosos y expectantes, los legisladores se retiraban cada tanto del recinto y aprovechaban la oportunidad para hacer llamados telefónicos y seguir negociando la posición de los indecisos.

Ya al amanecer, cuando uno de los que figuraba en la lista de indecisos, el puntano de José Luis Riccardo, afirmó en su exposición que su voto sería positivo, el recinto estalló. La votación parecía inclinarse definitivamente a favor del Proyecto. Solo quedaban los discursos de cierre. Y el de la oficialista Silvia Lospennato terminó su alucoción llorando, mencionando a las mujeres de todas las fuerzas políticas e ideologías, que a lo largo de la historia argentina encausaron la lucha por el aborto libre y gratuito. Logró una ovación de todos los que, a la postre, votarían a favor del proyecto.

Finalmente, después de más de 70 días de intenso debate, después de 700 exposiciones, después de multitudinarias manifestaciones a favor del proyecto, el debate sobre la legalización de la interrupción voluntaria del embarazo puso a la lucha feminista a las puertas de la historia. Al respecto, con lágrimas en los ojos, la diputada Cecilia Moreau, una de las primeras firmantes del proyecto, dijo a ANCCOM que el futuro es verde: «Ahora hay que seguir militando. Logramos que las chicas encuentren algo que las movilice y las una. Tenemos que ir por más derechos. Pienso en lo que ocurrió en la calle y siento que yo ya gané. Ahora sí que no nos para nadie».