Por Carolina Aranda
Fotografía: ARCHIVO ANCCOM: Nicolas Parodi y Melisa Molina.

A las 14.00 de este viernes, la Policía desalojó a los trabajadores de AGR-Clarín de la planta de Corrales 1393, Nueva Pompeya. «El desalojo fue pacífico, por suerte. Hubo como siempre mucho acompañamiento desde afuera», dijo a ANCCOM Sebastián Marietan, delegado de AGR-Clarín que trabaja desde hace 19 años en la planta.  Los gráficos continúan exigiendo la reincorporación de los 380 despedidos con un acampe en la vereda y este sábado realizarán una asamblea para decidir cómo seguir.

La policía llegó con una orden de allanamiento, se acercó al portón y la leyó. Luego de que la comisión interna hablara con la policía, salieron de la planta alrededor de 110 trabajadores que permanecían adentro. «Priorizamos la integridad de todos. Habíamos votado en una asamblea que si no eran violentos, íbamos a salir», explicó Ariel Caruso, que también trabaja hace 19 años en la planta impresora del Grupo Clarín.

Los trabajadores pidieron que un fiscal entrara a la planta junto a un testigo propio, para que quedara en actas que las máquinas y la planta estaba en perfecto estado. En el escrito también consta el acampe que están realizando actualmente los obreros. La camioneta de inteligencia que realiza espionaje a los trabajadores continúa en el lugar.

Marcha de los trabajadores de AGR-Clarin frente a canal 13 por la reincorporación de los trabajadores despedidos, el pasado enero.

Actualizad 07/04/2017