Por Daiana Glizer
Fotografía: Sofia Genovese

Un estudio realizado por el Observatorio Educativo de la Universidad Pedagógica (UNIPE) revela que el Presupuesto 2017 destinado para educación, si se aprueba tal como lo impulsa el gobierno nacional, será un 7% inferior al vigente. La investigación desmiente los dichos del Ministro de Educación y Deportes de la Nación, Esteban Bullrich, quien había declarado que la aprobación de esta ley representa “un aumento en el presupuesto educativo, sanción contra sanción, del 50%”. Si bien es cierto en términos nominales, su afirmación no considera la inflación ni otras variables que hacen a esta proporción sensiblemente menor en términos reales.

El informe, llamado “La educación en el presupuesto 2017” explica que “no son los números absolutos los que importan para este tipo de análisis sino los relativos; en particular, la participación de la educación en el presupuesto total, la composición interna del gasto educativo y su comparación con el año en curso”.

 

Hay distintos organismos del Estado que destinan recursos a ‘educación y cultura’. El principal es el Ministerio de Educación y Deportes, que en 2017 tendría un presupuesto de 130.950 millones de pesos. Otras reparticiones del Estado nacional destinarán 29.205 millones al mismo fin, con lo cual el presupuesto educativo total constituye la suma de ambos componentes: 160.155 millones. De acuerdo al análisis de UNIPE, si se aplica a este monto el correspondiente ajuste por inflación -el estudio tomó como referencia la pauta anual del 40% pronosticada por el FMI-, el presupuesto de “educación y cultura” de 2017 sería 114.397 millones, un 7% inferior a los 122.819 millones del 2016.

Leandro Bottinelli, docente e investigador de UNIPE y uno de los autores del informe, explicó a ANCCOM que más allá de la tasa de inflación que se considere y la polémica que esto conlleve, un comparativo de la participación de la educación en el presupuesto total también demuestra el ajuste previsto. “La porción que le tocaba a la educación en el presupuesto 2016 era de 7,8%. Si se aprueba la ley, en 2017 esa misma fracción será de 6,8%, lo que representa una pérdida de jerarquía presupuestaria de la educación. Es innegable que el Estado nacional está destinando menos, más allá de la discusión sobre la inflación”, afirmó.

El estudio permite entender a qué se debe el porcentaje señalado por Bullrich; no sólo no tiene en cuenta ningún índice de inflación respecto al año anterior, sino que además, de acuerdo al documento,  “todo el incremento del Presupuesto global del Ministerio de Educación y Deportes -denominación de la cartera desde diciembre de 2015- se explica por la inclusión en el presupuesto 2017 de tres rubros que antes se presupuestaban por fuera de la programación financiera de Pizzurno: el Programa Conectar-Igualdad tenía en 2016 una partida presupuestaria en ANSES, la construcción de escuelas, en el Ministerio de Planificación, y Deportes era una Secretaría dependiente de Presidencia”.

 

Por otra parte, el informe revela qué ítems sufren especialmente las mutilaciones presupuestarias. Así, el texto señala que “algunas de las partidas que más recursos perderían en 2017 son la de formación docente -Instituto Nacional de Formación Docente (INFOD)- y la de educación técnica, denominado Instituto Nacional de Educación Técnica (INET). En el primer caso, se advierte que el presupuesto 2017 sería, en términos reales, un 24% inferior al del año 2016. El caso del INET es similar: el año que viene la educación técnica tendría 27% menos recursos que el presente”.

 En cuanto a las universidades, si bien hay un aumento del 4% respecto del año pasado, esa suba parece engañosa. “El efecto de este incremento queda parcialmente neutralizado por la incorporación de cinco universidades nacionales al presupuesto: Pedagógica Nacional, San Antonio de Areco, Guillermo Brown, Scalabrini Ortiz, Comechingones”, dice el estudio, que además resalta: “Un dato adicional a considerar, es el virtual congelamiento de las plantas docentes” que se desprende de lo señalado en el artículo 12 del proyecto de ley de presupuesto, que establece que la Secretaría de Políticas Universitarias será la encargada de aprobar los nuevos cargos docentes de las universidades”.

 

Bottinelli destacó además que el ajuste a la educación no puede descontextualizarse de un presupuesto donde la parte destinada a deuda se incrementó en un 70% respecto a 2016. Y agregó que “la disminución del presupuesto educativo tiene que ver en gran medida con el crecimiento del rubro deuda, que se empieza a devorar recursos de áreas sociales y productivas”.

Por su parte, el economista Federico Pastrana manifestó que «será dificil que se puedan poner condiciones fuertes que modifiquen el proyecto presentado por el Ejecutivo, la oposición tiene un grado de fragmentación muy grande. Lo más probable es que se promulgue sin modificaciones”.

 

Además, Pastrana afirmó que el gobierno previó para el año proximo una inflacion del 17%, pero que «no está muy claro cuáles serán los mecanismos para bajar tanto la inflación de un año para el otro… pasar del 45% al 17% es muy optimista. Esto afectará todas las variables, impacta en el presupuesto educativo real».

El 15 de septiembre de este año el Poder Ejecutivo Nacional, a través del Ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, había presentado el proyecto de Presupuesto 2017 en el Congreso. Casi un mes después, el 11 de octubre, el Ministro de Educación y Deportes de la Nación, Esteban Bullrich, celebraba en la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados la partida destinada a su área.

De acuerdo a la Constitución Nacional, la programación de los gastos que realizará el Estado nacional debe ser enviada por el Poder Ejecutivo al Congreso para ser debatida en ambas cámaras y aprobada como cualquier otra ley. El oficialismo espera que sea aprobada hoy en Cámara de Diputados.

Bottinelli expresó que lo que está sucediendo “suena repetido… es algo recurrente en nuestra historia económica desde la última dictadura militar, cuando la deuda argentina empezó a ocupar partes muy importantes del presupuesto y a ahogar el presupuesto nacional. La educación fue uno de los rubros que más históricamente afectó”.

 

Actualizado 1/11/2016